Thursday, July 23, 2009

VISTO PARA SENTENCIA


Todos nos investimos de poder, sobre todo cuando nos dedicamos a juzgar cosas que, en la mayoría de los casos, desconocemos en sus principales elementos que nos sirvan para emitir nuestro veredicto final.

No quiero entrar en el uso de la jerga legal, o mejor dicho, la apropiada de los abogados cuando se encuentran en el uso de su profesión. Intentaré ser lo más coloquial y sencillo.
Un hospital, como cualquier otro espacio público en donde nos movemos, puede ser un punto neurálgico para que sucedan cosas que nos impactan y que, como ahora, ocupan las portadas de todos los informativos. Podría ocurrir en un estadio, sucede en las carreteras, pero la noticia es la noticia, y nosotros, los ciudadanos de un estado democrático, en el uso de nuestros derechos de opinión, nos investimos de jueces y alimentamos posturas extremas que no son nada beneficiosas para entender y atender la realidad del problema.
Dice el refrán ¡Lo que el médico yerra lo tapa la tierra! Y hasta ahora, a regañadientes, si el error humano del galeno nadie lo notaba, todos llorando al familiar perdido, y creo que muy preocupado debería quedar el ser humano, que en su profesión no había procedido de forma adecuada.
Esto se da todos los días. Nadie puede percatarse de que le llegue una medicación equivocada; desconocer si es alérgico a algo o simplemente no se le administre a tiempo. Todo esto sucede todos los días y se mediatiza muy poco.
Ryan (o Rayan), no ha tenido mucha suerte en su corta vida. Ya la perdida de su madre ¿por omisión o error médico? No puedo decirlo, no tengo elementos que me faciliten un juicio de valor y poder emitir mi opinión. Sin embargo, en ciertos foros de la red de Internet, se llega a echar la culpa…¡A Esperanza Aguirre! Por ser problema de quienes regenta la comunidad de Madrid.
El análisis debe de ser más sincero y realista. Es un error grave, y se han de depurar responsabilidades, entender que ha sucedido y poner todos los medios para que no suceda más. Atender a una correcta práctica de la profesión y entender que se trabaja con SERES HUMANOS. Las profesiones que trabajan al hombre han de ser totalmente vocacional, no se puede trabajar por lucro en ellas. Aunque a pesar del juramento hipocrático, son muchos los que solo piensan en su lucro personal y nada en la necesidad del paciente.
El juez juzga los actos del ser humano, el médico busca lo mejor para que no padezca de dolores y paliar sus enfermedades, el guía espiritual con su alma, pero el maestro o la maestra es que han de velar para que no cometa actos que le lleven al juzgado, ni realice otras acciones que vayan contra su salud. Sea el maestro y la maestra los que nos formen para ser mejores, no digo los mejores. Desde ese aprendizaje, seguro que seremos capaces de tener veredictos más justos y más acordes para atender a la educación de nuestros hijos o para entender al propio ser humano que convive con nosotros.

No comments: